Buen comienzo de semana, esta es la última manualidad que publico en el año, espero haberlos inspirado aunque sea un poquito a que se zambullan en el mundo de las artesanías, en el placer que da crear con las manos.
Si no es así, espero que empiecen el año que viene, no importa si las cosas no salen tan lindas como quisiéramos, lo importante es intentar, la felicidad no es un destino, es el camino.
Hoy les traigo una técnica simple, que es la sublimación.
En este caso sublimé un azulejo, deben adquirir un producto que sirve para este fin.
Lo colocan sobre el azulejo, siguen las instrucciones del envase y luego subliman la imagen que hayan elegido.
Fíjense que el azulejo mantiene el brillo que tiene.
La lámina que usé viene especialmente para sublimar, no puede usarse cualquiera.
El soporte que empleé sobre el que pegué el azulejo es un porta-llaves o cuelga-llaves de fibrofácil,
Lo pinté con acrílico de un verde parecido al de las hojas de la lámina, luego dejé secar y pinté encima con blanco antiguo.
Lijé para decapar y que se vea el verde en los bordes.
Barnicé para proteger.
El trabajo final colgado en la pared de entrada de mi casa.
Saludos para todos, amigos, hasta pronto.
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